Yo, que siempre he sentido fascinación por estos grandes animales (no he crecido) leo con sorpresa que mientras se pensaba que habían sido extintos por el impacto de un gran meteorito sobre la Tierra, eso es falso. Fueron dos los impactos. Los científicos de la Universidad de Aberdeen han hecho el descubrimiento.

¿Cómo lo han sabido?

Cuando acontece una catástrofe planetaria y mueren miles de especies, los primeros en reclamar el terreno son los helechos. Tras el impacto que asoló la tierra y acabó con buena parte de los temibles lagartos gigantescos (ahora se sabe que son más aves que reptiles), hubo una nítida etapa de silencio en las capas de la Tierra y, después, los helechos. Al revisar con cuidado los hallazgos, fueron capaces de identificar una segunda capa.

Al parecer, unos cuantos miles de años después del impacto meteórico que inició la decadencia de esta estirpe formidable, hubo un segundo meteorito, igual de poderoso, que firmó el destino de estas fieras.